Todos tenemos la
capacidad de construir en vez de destruir, podemos usar esa capacidad de construir
para cambiar la realidad de nuestro cantón. Decidamos ver las cosas de forma
diferente, veamos cada problema como una oportunidad para crecer. Usemos toda
la energía que gastamos en criticar, en cosas positivas, como empoderar a
nuestras comunidades, trabajando y construyendo juntos.
Envíemos los
pleitos partidarios frívolos y las diferencias personales, al lugar al que pertenecen:
al pasado.
No estamos
trabajando para favorecer, enriquecer o dar privilegios a un grupo. Somos un
equipo y como equipo sabemos que lo importante ahora es enfocarnos en construir
el futuro, un futuro centrado en la gente, en cada niño, en cada joven, en cada
mujer y hombre, en cada persona. Porque nuestra visión es superior, nuestra
visión es por Turrialba.
Tenemos un reto,
el reto de entender que construir un mejor cantón para todos está en nuestras
manos. Somos nosotros los que decidimos cual es el futuro que deseamos
construir para nosotros mismos.
Tenemos personas
valiosas en nuestro cantón que están dispuestas a generar ese cambio. Tenemos
el poder como pueblo para decidir lo que queremos, pero todavía nos falta la
voluntad y el compromiso de todos.